¿Cuántos muertos nos rodean?

No sé tú pero yo a veces puedo sentirme triste, solitaria y perdida. Mientras el tiempo sigue avanzando sin un sentido aparente. ¿Lo que te ocurre simplemente pasa por azar o porque realmente debe pasar? Debe ser natural el perderse en las hojas del otoño y rogar porque algo que te abrace, algo que te haga sentir permanente. Siempre buscando afuera, en el exterior, ese algo que imaginas te hará sentir mejor, pero la verdad es que no buscas nada… ya que tienes todo. Tu mano se une a tu otra mano,  tu respiración no te abandona, tus ojos siempre permanecen y  nadie tiene el poder de hacerte caer.

¿Cuántos muertos nos rodean? ¿Cuántos han querido avanzar y han muerto intentándolo?

Me siento culpable con mi ramito de emociones baratas, es lo que me dan para experimentar ¿Quien Soy? ¿Quién vendrías siendo tú? No somos los que ganamos, somos lo que llevamos dentro. Somos emociones transmutadas, no se puede uno quedar con el pasado cargado en los ojos esperando vivir en él para recordar, porque el tiempo avanza y el ser humano debe ser ágil para actuar correctamente. Así que cuando aprendí la palabra TRANSMUTACIÓN me sentí mejor, porque todo se transforma y está bien. Así que acepto las aventuras y mis preguntas, me abrazo, lloro por un momento si quiero y solo me consuelo contándome que un día todo estará mejor, aunque probablemente eso cueste mucho.

Cuanto extraño botar mis lagrimas en el hombro de alguna mujer humana, sentir su apoyo a través de su piel, esa mirada cara a cara que te hace sentir segura y contenida, porque la hermana sabia sabe lo que es la empatía, las amigas siempre están a través de las pantallas pero es distinto pal tacto.  La amiga probablemente llore contigo mientras el silencio sopla los cabellos y los lleve al enredo, mientas fuma y toma chela, vino, agua, te, café.

Llevamos en nuestro cuerpo el portar de la transformación que nos convierte en magas, la bruja que quisieron quemar por escuchar con sensibilidad lo que ocurría en su ser espiritual. La tristeza ha culminado, solo necesitaba recordar quien soy: mujer intuitiva en crecimiento, aceptando los sucesos y transmutando el portal.

Me acepto y las puertas se abren.

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